¡Posibilidad de vida en otros planetas! ¿La ciencia ficción comienza a rozar la realidad? No se trata de seres verdes ni de viajes interestelares con naves futuristas. La vida en otros planetas, si existe, probablemente sea microscópica.
Los descubrimientos recientes de exoplanetas templados orbitando estrellas cercanas y la llegada del Telescopio Espacial James Webb (JWST; Gardner et al. 2006) han abierto nuevas oportunidades para detectar biofirmas en planetas potencialmente habitables.
Aunque los exoplanetas que orbitan estrellas similares al Sol aún están fuera del alcance de este telescopio, los que orbitan estrellas tipo M enanas sí están dentro de su rango de observación (Seager, 2014).

K2-18b: un candidato fuerte para encontrar vida en otros planetas
Astrónomos de la Universidad de Cambridge han detectado una de las señales más prometedoras de posible vida fuera del sistema solar. Se trata del planeta K2-18b, clasificado como un planeta hyceano (cuenta océanos superficiales). Este planeta se encuentra a 124 años luz de la Tierra y tiene aproximadamente 2.6 veces el tamaño de nuestro planeta. Su órbita dura 33 días terrestres, y recibe una cantidad de radiación estelar comparable a la que la Tierra recibe del Sol (NASA Exoplanet Archive, 2024).
El planeta fue descubierto inicialmente en 2015 por el telescopio Kepler, y ha sido objeto de estudio detallado por el telescopio James Webb para analizar su atmósfera. En 2019, se detectó por primera vez vapor de agua en la atmósfera de K2-18b (Tsiaras et al. 2019), lo que despertó el interés de la comunidad científica. En 2023, el JWST encontró metano y dióxido de carbono, lo que sugería posibles procesos biológicos. Sin embargo, el hallazgo más sorprendente se produjo recientemente.
Señales químicas: ¿biofirmas de vida en otros planetas?
El 17 de abril de 2025, los astrónomos de Cambridge publicaron en The Astrophysical Journal Letters la posible detección de dimetil sulfuro (DMS) y dimetil disulfuro (DMDS) en la atmósfera de K2-18b. En la Tierra, ambos compuestos son producidos exclusivamente por organismos vivos, principalmente por el fitoplancton marino.
Estas moléculas podrían representar las primeras señales de una firma biológica fuera del sistema solar. No obstante, los científicos advierten que aún no debemos emocionarnos en exceso, ya que podrían existir explicaciones alternativas basadas en procesos geoquímicos desconocidos. “Es importante que seamos profundamente escépticos con respecto a nuestros propios resultados, porque solo probando una y otra vez podremos alcanzar la confianza en ellos”, declaró el astrofísico Nikku Madhusudhan, líder del estudio.
¿Cómo se detectan estas señales de vida?
Para conocer la composición química de la atmósfera de un exoplaneta, los astrónomos analizan la luz estelar durante un tránsito planetario, es decir, cuando el planeta pasa frente a su estrella desde nuestra perspectiva. En ese momento, parte de la luz de la estrella atraviesa la atmósfera del planeta, permitiendo identificar los elementos químicos presentes gracias a las huellas espectrales (espectro de luz) que dejan.
El JWST utilizó instrumentos como NIRISS (Near-Infrared Imager and Slitless Spectrograph) y NIRSpec (Near-Infrared Spectrograph), que trabajan en el infrarrojo cercano (0.8 a 5 micrones), así como el MIRI (Mid-Infrared Instrument), que opera en el infrarrojo medio (6 a 12 micrones), para confirmar la presencia de compuestos en distintas longitudes de onda.
Conclusiones: ¿Qué significa esto para la humanidad?
Este descubrimiento marca un punto de inflexión en la búsqueda de vida en otros planetas . Aunque la evidencia aún es preliminar, plantea preguntas importantes sobre el origen de la vida, las formas que podría adoptar y su presencia en el universo. Nos obliga a reconsiderar cómo se forma la vida, qué condiciones son realmente necesarias y si estamos solos.
De confirmarse que los compuestos detectados en K2-18b provienen de actividad biológica, sería la primera vez que identificamos un indicio directo de vida más allá de la Tierra, aunque sea a nivel microbiano. Además, este tipo de estudios nos ayuda a entender mejor los procesos químicos que podrían haber dado origen a la vida en nuestro propio planeta hace miles de millones de años.
Referencias
- Thomson, J. (2025, April 17). Scientists reveal ‘most promising yet’ signs of alien life on planet K2-18b. Live Science.
- Strickland, A. (2025, April 17). Webb telescope detects potential biosignature on exoplanet K2-18b. CNN.
- Greenfieldboyce, N. (2025, April 16). Signs of life on alien planet K2-18b? Some are skeptical. NPR.
- Collins, S. (2025, April 17). Strongest hints yet of biological activity outside the solar system. University of Cambridge.
- Madhusudhan, N., Smith, A., Holmberg, M., et al. (2025). Detection of dimethyl sulfide and dimethyl disulfide in the atmosphere of K2-18b. The Astrophysical Journal Letters, 950(2), L12.
- Gardner, J. P., Mather, J. C., Clampin, M., et al. (2006). The James Webb Space Telescope. Space Science Reviews, 123, 485–606.
- Seager, S. (2014). The future of spectroscopic life detection on exoplanets. Proceedings of the National Academy of Sciences, 111(35), 12634–12640.
- Tsiaras, A., Waldmann, I. P., Tinetti, G., et al. (2019). Water vapour in the atmosphere of the habitable-zone eight-Earth-mass planet K2-18b. Nature Astronomy, 3(12), 1086–1091.
- NASA Exoplanet Archive. (2024). NASA Exoplanet Archive.

